Web services used on your computer, smartphone, tablets (and other devices)are usually hosted on the “cloud”: servers spread across the planet, that host not only your data (emails, pictures, files, etc.), but also the application code.<br /> For your data, this raises the issue of sustainability (what would become of your files if Dropbox were to close tomorrow?) and of your ability to switch easily between services (how would you recover your data from Facebook or Picasa and import it, with all the adjoining comments, into another service?). <br /> For applications, this means that <strong>you are completely at the mercy of your service provider</strong> when it comes to proliferation of advertisements, changes to the user interface, etc., and that you have hardly any control over the way an application works. It is a “black box” that can exhibit malicious behaviour (sending spam SMS without your knowledge, executing malicious code, and so on).<br /> In short, these companies trap us in gilded cages: gilded yes, but cages nonetheless!
Los servicios web que usted usa en su computadora o su smartphone se ejecutan normalmente en la «nube» : algunos servidores diseminados por el planeta , que almacenan tanto sus datos (mails, fotos, archivos, etc.) como el código de las aplicaciones<br /> Para los datos, se plantea el problema de su perennidad (¿qué será en efecto de sus ficheros archivos si Dropbox cierra mañana?) pero también el de la capacidad de usted de cambiar de servicio (¿cómo hará para recuperar la totalidad de sus fotos en Facebook o Picasa, y volver a insertarlas con los comentarios dentro de otro servicio?).<br /> En cuanto a las aplicaciones, ello implica que <strong>usted queda a merced de cambios imprevistos según los caprichos de su proveedor </strong>(incorporación de publicidad, modificación de la interfaz, etc.), pero sobre todo que no tiene casi ningún control sobre lo que la aplicación puede hacer. Son «cajas negras» que pueden actuar de manera maliciosa (mandar SMS a sus espaldas, ejecutar código indeseable, etc.).<br /> Para terminar, estas compañías nos encierran en jaulas doradas, es cierto, ¡pero jaulas a pesar de todo!